Cursando el sexto semestre de Ingeniería en Inteligencia Artificial, Samuel Iván Sánchez es un estudiante que además de destacar académicamente en su carrera, ha sido una inspiración para niños y niñas que tienen gusto por la tecnología, pues actualmente imparte el "Taller de Robótica" en Comunidad Bonaterra.
Una de los motivos por los que a Samuel le encanta su carrera es debido a la gran relación con la tecnología y la gran cantidad de áreas en la que se puede aplicar, también que de alguna manera considera que son matemáticas aplicadas a algo más práctico.
Desde segundo semestre y la mayoría de las actividades que Samuel ha realizado dentro de la universidad han estado relacionadas con Comunidad Bonaterra.
"Aquí me ha tocado hacer de todo, desde el mantenimiento de instalaciones y colecta de donativos hasta la planeación y coordinación de actividades para niños y jóvenes, les he dado clases de inglés, STEM y manualidades", comenta.
Gracias a su vocación docente, desde el verano pasado comenzó a impartir un taller de robótica, primero con material de LEGO Mindstorms, pero este semestre cambiaron a Arduino. Lo que se busca con este taller, es introducir a los adolescentes de estas comunidades al mundo de la ingeniería, pero principalmente el desarrollo de virtudes como el orden, la paciencia y el respeto a través del trabajo en equipo.
"Es un programa al que le tengo mucho cariño y que afortunadamente ha crecido con el tiempo, estoy muy agradecido con Carolina Palacios y Lorenza Larios, coordinadoras del proyecto, por haber confiado en mí para empezar un taller de este tipo", expresa.
Además, para Samuel durante este tiempo ha aprendido demasiado no sólo sobre él y de lo que puede ser capaz, sino sobre su ciudad y la gente que vive en ella, así como el impacto indirecto que tienen muchas de las acciones de Comunidad Bonaterra con los demás.
Para el futuro ingeniero en Inteligencia Artificial, el sentido de servicio a los demás, en especial a aquellos que se encuentran en una situación completamente diferente a la de uno mismo, es el legado que ha recibido por parte de la Panamericana.
"Algo que he aprendido durante mi tiempo en la universidad es que cuando das algo a los demás, por insignificante que parezca, terminas recibiendo muchísimo más", comparte.