El método del caso combina dos elementos: el caso en sí y la discusión del mismo. Un caso de enseñanza es una narrativa compleja en la que estudiantes o grupos deben tomar una decisión o resolver un problema.
Un caso de enseñanza no es un "estudio de caso" del tipo que se utiliza en la investigación académica. Los casos de enseñanza aportan información, pero no análisis ni conclusiones.
La tarea analítica de explicar las relaciones entre los eventos en el caso, identificar las opciones, evaluar las elecciones y predecir los efectos de las acciones es el trabajo que los estudiantes deben realizar durante la discusión en el aula.
¿Qué son los casos?
Los casos son narrativas que contienen información y propician el análisis. Los participantes se hallan en la posición de tomar decisiones o hacer evaluaciones con base en la información disponible.
Los casos pueden adquirirse de material escrito formal y específico disponible en diversas fuentes, o pueden ser elaborados por miembros de la facultad a partir de artículos de periódicos, caricaturas, narraciones de radio e incluso volantes.
Los casos pueden involucrar situaciones en las que deben tomarse decisiones o resolverse problemas, o conllevar la evaluación o reformulación de políticas públicas, prácticas o propuestas existentes.
Los casos efectivos generalmente se basan en eventos reales, pero pueden extraerse tanto del presente como del pasado, aun de un pasado lejano.
Los casos requieren que los estudiantes tomen decisiones sobre qué teoría o conceptos les conviene aplicar al efectuar el análisis. Esto es distinto de la correspondencia uno a uno entre teoría y aplicación que ven en libros de texto o escuchan en conferencias.
¿En qué se diferencian los casos de otros tipos de ejemplos?
Se distinguen de los ejemplos en libros de texto o de los que se exponen en conferencias, -como lo hemos mencionado- los casos incluyen información pero no proporcionan análisis.
Los casos presentan a los estudiantes problemas complejos y no estructurados que pueden aportar información extraña o irrelevante y, a menudo, no contienen toda la que un analista quisiera tener.
A diferencia de los conjuntos de problemas, no dividen el problema en pasos claros y, con frecuencia, no existe una única respuesta "correcta" para resolverlo. Los casos poseen una forma contextual rica para presentar material nuevo y facilitar oportunidades para que se integre el material recién aprendido.
Un caso general puede usarse varias veces en el mismo curso, pues los estudiantes pueden volver a revisar la historia del caso con nuevas técnicas y herramientas analíticas.
¿Cómo se aplica en un aula?
En la discusión en el aula, los estudiantes analizan la información del caso y la utilizan para resolver el problema planteado por el caso.
La discusión puede cobrar varias formas: preguntas directas por parte del profesorado para ayudar a los estudiantes a extraer la información del caso e identificar las decisiones que deben tomarse, o discusiones más abiertas en las que los estudiantes evalúan las opciones y sopesan la evidencia en grupos pequeños.
Muchos profesores se valen del juego de roles como una técnica para implicar de lleno a los estudiantes en el entorno del caso. Idealmente, las discusiones se dan entre estudiantes, en lugar de que se centren en la participación directa del profesor.
Los casos se usan de manera eficaz para enseñar pensamiento crítico y razonamiento cuantitativo, y se han incorporado con éxito a una amplia gama de disciplinas como ciencias políticas, economía, derecho, negocios, química, historia y lingüística, tanto en aulas de pregrado como de posgrado.
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