Es un hecho indudable que comer es tan importante en cualquier experiencia humana, si no más, como tener un lugar para dormir.
Durante muchos años, las principales compañías hoteleras se han enfocado casi únicamente en impulsar sus ingresos mediante el hospedaje, han considerado el departamento de alimentos y bebidas como un servicio y se han conformado con no perder dinero con él.
Importancia del departamento en la actualidad
Anteriormente, los hoteles de lujo dependían en gran medida de eventos multitudinarios y conferencias para generar ingresos a través de su departamento de alimentos y bebidas.
Pero los tiempos han cambiado, el mercado y la competencia han crecido bastante a la par, por lo que las empresas hoteleras han tenido que reinventarse a sí mismas y a sus productos. Los límites entre el lujo y el nivel medio, en servicios y productos, han llegado a ser más difíciles de definir que antes.
Esa área media en el mercado, entre los hoteles de lujo y los más económicos, es donde hoy podríamos clasificar a la mayoría de los hoteles, y cada compañía se enfoca en brindar su propia experiencia única de hospitalidad a los clientes.
Todo apunta a que en el futuro próximo muchos hoteles serán más pequeños, ofrecerán un servicio completo centrado en alimentos y bebidas y se orientarán a promocionar “estilo de vida”, ya sean hoteles corporativos urbanos o centros vacacionales.
Elemento transformador de los hoteles
El departamento de alimentos y bebidas ya es reconocido como un elemento clave para el posicionamiento de un hotel dentro de su mercado y desempeña un papel crucial en la transformación de hoteles, en mejorar sus ingresos por hospedaje y convertir las áreas de alimentos y bebidas en unidades "independientes".
Cuando existe alta competencia entre hoteles, un departamento de alimentos y bebidas puede hacer que uno se destaque y sea preferido por huéspedes y clientes.
Así, por ejemplo, puede impulsar el negocio de eventos y banquetes de un hotel y ampliar sus márgenes de ganancia. Los eventos, a su vez, pueden hacer que se reserven más habitaciones, en un círculo de retroalimentación que aumenta el valor general de los activos.
Relación con otros aspectos sociales
En parte, gracias al éxito de los programas de cocina en la televisión cada vez son más el número de "gourmets" y personas interesadas en el ámbito de alimentos y bebidas, y ahora están mejor informados y son más críticos sobre la comida (y el servicio) que reciben en los hoteles y restaurantes.
Lo anterior también incide en las reseñas y artículos en el internet, las redes sociales y los sitios de calificación, que se han vuelto una parte integral de nuestras vidas y no pueden quedarse sin atender.
El tiempo es determinante tanto como el énfasis en la procedencia de la comida y la bebida, y la sostenibilidad, la preocupación por el medio ambiente y la responsabilidad en el uso de los recursos de las empresas. Los grupos hoteleros no deben quedarse atrás.
“Alimentos y bebidas” ya no es una idea de último momento, es preciso que se convierta en el foco de atención. Quizás por eso los restaurantes y bares de los hoteles están marcando tendencias, no siguiéndolas.
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El desarrollo de convenios con chefs de renombre es casi un lugar común para las cadenas hoteleras más importantes. También la música y el arte tienen un vínculo natural con la comida y la bebida y cuando se fusionan se abre todo un abanico de posibilidades.
Rol de la dirección del departamento
En última instancia, para que el departamento de alimentos y bebidas de cualquier hotel consiga sobresalir y elevar la calidad de sus servicios y su ambiente es indispensable que cuente con una dirección competente e innovadora. Aquí enlistamos algunas de las actividades que debe priorizar:
- Establecer estándares de productos y servicios y velar por su cumplimiento.
- Generar conceptos de A&B y planear nuevas aperturas en hoteles de la cadena.
- Actualizar el servicio de forma constante con prácticas de alimentos y bebidas de vanguardia.
- Promover experiencias, menús y conceptos; garantizar que el hotel se mantenga como un lugar atractivo tanto para los huéspedes como los invitados externos.
- Elaborar calendarios de eventos especiales y diseñar planes estratégicos con los equipos de ventas, marketing y redes sociales con el fin de aumentar la exposición en los medios.
- Buscar nuevos proveedores y vendedores para mejorar la rentabilidad y elevar la calidad de los servicios de A&B.
- Brindar apoyo en la elaboración de los presupuestos anuales.
- Asegurar un control efectivo sobre los gastos de alimentos, bebidas, mano de obra y operativos en todas las divisiones de A&B.
- Supervisar la selección, capacitación y desarrollo del personal líder en alimentos y bebidas.
Palabras finales
Año tras año las empresas hoteleras son más conscientes de la importancia de los departamentos de alimentos y bebidas y ahora más que nunca deben estar dispuestas a invertir tiempo y recursos en esta área.
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