Cómo establecer límites durante la adolescencia

Cuando las hijas llegan a la adolescencia, la estructura familiar puede verse comprometida, ya que debido a los cambios emocionales y físicos a las jóvenes les cuesta trabajo relacionarse con sus padres de la misma forma en la que lo hacían durante la infancia. Esto puede suscitar fallas en la comunicación y a la vez, derivar en conflictos al momento de seguir las reglas del hogar.

Es necesario que en cada hogar se haga un replanteamiento de las reglas, no se trata de omitirlas o que cambien drásticamente, sino de tener presente que tu hija se encuentra en esta etapa, por lo que es importante que abarques otros aspectos dentro de su vida y las hagas partícipes al establecer los límites. 

A diferencia de las generaciones anteriores, hoy existen nuevos modelos de crianza en donde los padres se cuestionan y analizan qué es lo que realmente quieren aplicar en su hogar como un límite y procuran que éstos concuerden con sus valores. Así, tu objetivo como padre no será simplemente imponer reglas, sino explicarle a tu hija el por qué de ellas. 

Por otro lado, hoy en día el consumismo se ha convertido en un fuerte enemigo de las reglas en el hogar, ya que muchos padres buscan atenuar los conflictos o hacer que sus hijas cumplan con sus responsabilidades a través de recompensas. Al ponerle precio a las obligaciones de tu hija, le otorgas el control sobre ti.

<< 4 pláticas para mejorar la relación con tu hija >>

Para establecer límites efectivos durante la adolescencia, deben de tener las siguientes características:

- Ser claros para que tu hija los entienda y los cumpla fácilmente.

- Adaptarse a la edad, la madurez y el grado de responsabilidad de tu hija.

- Ser confiables, tanto para tu hija como para ti como papá.

- Ofrecer seguridad, tanto a los padres como a las hijas adolescentes.

- Debes establecerlos anticipadamente para que tu hija sepa qué esperas de ella.

Existen dos tipos de límites: los de acción y los de convicción. Los primeros tienen que ver con las responsabilidades de tu hija, por ejemplo, hacer su tarea u ordenar su habitación, así como lo que está permitido y lo que no dentro de tu hogar, acciones en las que tú tienes el control como padre para que se cumplan.

 Los primeros tienen que ver con las responsabilidades de tu hija, por ejemplo, hacer su tarea u ordenar su habitación, así como lo que está permitido y lo que no dentro de tu hogar, acciones en las que tú tienes el control como padre para que se cumplan.

Los límites de convicción tienen que ver con los valores e ideologías que tu hija ha aprendido en el hogar, estas reglas son establecidas por ella misma y las consecuencias son sentirse mal al no seguir su propio código de ética. Por ello, es importante que prediques con el ejemplo.

En la prepaUP nos distinguimos por ser una de las mejores prepas privadas debido a que, además de la formación académica, buscamos el desarrollo integral de nuestras alumnas a través de la educación con valores.