Cuando se trata de la educación de nuestros hijos, cuantas más opciones tengamos, mejor. Pero tener más opciones puede hacer que el proceso de elección de preparatoria sea más difícil, pues nos vemos obligados a responder varias preguntas.
¿Dónde se sentirá mejor mi hijo durante los próximos años? ¿Nos conviene elegir una opción cercana o una de las mejores preparatorias privadas? ¿La escuela es realmente tan buena como parece?
Para ayudarles a los padres a evitar trampas comunes al elegir una preparatoria para sus hijos, aquí contestamos a la pregunta más importante a contemplar: ¿qué escuela será la mejor para mi hijo? Evita estas 3 trampas que no debes ignorar al elegir una buena prepa para él:
1. Elegir un colegio sólo como medio para alcanzar un fin
Muchos padres se obsesionan con la idea de que la preparatoria es sólo un medio para ingresar a la universidad, y se olvidan de pensar en las experiencias que tendrá su hijo en esos tres años, de enorme relevancia para él.
La preparatoria es el período en el que los jóvenes aprenden a pensar críticamente, a analizar los pros y los contras de las situaciones, a explorar a fondo el aprendizaje, a identificar sus pasiones, a estudiar de forma independiente, a defender su postura y a desarrollar relaciones más significativas con sus profesores.
¿El colegio cultiva un ambiente y los recursos para que ese nivel de participación pueda darse? Comprueba qué tan personalizada es la atención a los alumnos y presta atención a la cantidad y calidad de los cursos y los talleres que se ofrecen.
¿Existen muchas actividades extracurriculares para que tu hijo adolescente pueda explorar nuevos intereses?
2. Elegir una escuela sólo por la proporción de admisiones de sus egresados
El hecho de que una preparatoria pueda ostentar las admisiones de sus estudiantes egresados a las mejores universidades no debe ser el criterio principal a la hora de elegir preparatoria. Los padres deben intentar conocer por qué los alumnos son admitidos en esas universidades.
¿Se debe a que la comunidad tiene una excelente relación con universidades de primer rango, una que podría aprovechar tu hijo? ¿O, además, es por el modelo educativo del colegio y porque los estudiantes están excepcionalmente preparados para la universidad?
Mucho mejor si son ambas razones, pero recordemos que los beneficios que nuestros hijos reciben en la preparatoria bien podrían durarles para toda la vida. Debido a las competencias que suelen empezar a dominar a esta edad, los padres deben priorizar mucho más que el pase directo a una universidad de prestigio.
Contenido relacionado: 5 características de una preparatoria privada de calidad
3. Elegir una escuela sin tener en cuenta la cultura y el ambiente de la escuela
Las amistades y la socialización son una parte que se destaca de la experiencia en la preparatoria. Observa cómo los compañeros conviven y se llevan entre sí. ¿Se sienten cómodos el uno con el otro?
Otro indicador crucial de un colegio está en su organización. Un líder con presencia y que inspira a los demás puede ser la clave de una experiencia más fructífera, en la que profesores y alumnos trabajan productivamente juntos.
Procura visitar la escuela en un momento en que te sea posible conocer cómo se desempeña el director. ¿Cómo actúan los estudiantes alrededor suyo? ¿existe confianza y respeto o lo contrario? ¿El personal parece estar comprometido con él y se siente alegre de formar parte de la institución?
Contenido relacionado: 3 factores que influyen en la cultura escolar de manera positiva
Con frecuencia ignoramos detalles como éstos al momento de elegir la preparatoria ideal para nuestros hijos, pero son aspectos que tienen una gran importancia para su satisfacción en el colegio y, aún más, para que puedan aprovechar todo lo que una buena escuela debería ofrecerles.
La Preparatoria Panamericana te invita a que conozcas todo lo que puede aportarle a la formación de tu hijo, agenda una cita en línea para resolver cualquier duda sobre nuestra institución, aquí:
También podría interesarte: