Cuando pensamos en aquello a lo que queremos dedicar nuestras vidas, nos surgen muchas dudas, sobre todo, porque queremos elegir algo que nos haga felices, pero que también nos permita tener buenos ingresos y ser reconocidos, por lo que la orientación vocacional es clave para que escojas tu carrera.
Y es que algo que debes tener claro es que, aquella profesión o título profesional que estudies no te define por completo, sino que te ayuda a orientar tu quehacer.
De hecho, la idea es que selecciones una carrera que responda a tu vocación y que empate con tus intereses, talentos y metas para que puedas desarrollar al máximo tu potencial y cumplir con tus sueños.
Te preguntarás, entonces, ¿qué puedo hacer para elegir mi carrera de forma correcta? Debes saber que la respuesta está en el autoconocimiento.
Tener claro quién eres, para qué eres bueno, qué expectativas tienes para los próximos años de tu vida, entre otras cosas, te ayudará a decidirte de forma certera.
Pero, si no estás seguro de cómo contestar estas cuestiones, ¡tranquilo! En este artículo te ayudaremos a descifrar cómo las principales características que tienes y que conforman a tu personalidad, son la clave para entender cuál es la licenciatura ideal para ti.
1. ¿Te gusta liderar equipos de trabajo, tomar decisiones importantes, analizar tu entorno y proponer soluciones?
Muchas personas disfrutan del trabajo en equipo, pero, sobre todo, de guiar a otras personas para lograr objetivos comunes, tienen la capacidad de tomar decisiones certeras y de forma rápida, cuentan con mucha iniciativa y se distinguen por ser observadoras, ¿te identificas con esta descripción?
Estas características en particular corresponden al tipo de personalidad “emprendedora” y empatan con algunas de las carreras empresariales, como Finanzas, Negocios Internacionales y Contaduría.
Piénsalo, en el entorno empresarial es importante que los profesionales puedan controlar situaciones de crisis, motivar y coordinar grupos y proponer soluciones para todo tipo de obstáculos que puedan presentarse en las compañías, por lo que si tienes talento para estas actividades, tu personalidad brillará en una de las opciones académicas mencionadas.
Y, no sólo eso, sino que desarrollarás tus talentos y tu camino profesional no tendrá límites.
2. ¿Te apasiona tratar con personas y ayudarlas a explotar su potencial?
Cuando se habla de orientación vocacional, una de las preguntas clave que debes hacerte a ti mismo es si prefieres trabajar con otras personas o si, por lo contrario, disfrutas más cuando estás sólo al realizar tus proyectos.
Este rasgo también puede ser un pilar que te ayude a identificar qué debes estudiar, puesto que, por ejemplo, si quieres colaborar con otros y, además, te apasiona encontrar las fortalezas de los demás y reunir grupos, es probable que tengas el tipo de personalidad “ejecutiva”.
En caso de que lo que has leído en este punto sea afín a ti, la carrera de Recursos Humanos, por ejemplo, es una excelente alternativa que debes considerar para desarrollarte.
Y es que a través de esta licenciatura podrás aprender a orientar a otros para dar lo mejor de sí en sus empleos, los ayudarás a contribuir desde su perspectiva a los proyectos o compañías en las que colaboren y reconocerás fácilmente en qué tipo de actividades puede desempeñarse con éxito.
Eso sí, este tipo de personalidad implica no sólo que sepas distinguir los talentos y áreas de oportunidad de quienes te rodean, sino que también debes ser capaz de encontrar qué características te distinguen a ti mismo.
3. ¿Te consideras una persona lógica, práctica, analítica y orientada a logros?
Una de las características de la personalidad que muchas personas ignoran al momento de llevar un proceso de orientación vocacional, pero que puede ser de gran relevancia para escoger una carrera es si su toma de decisiones y su forma de actuar depende más de sus emociones, sentimientos y percepciones o de datos verificados y hechos reales.
Y es que esto también te puede orientar en gran medida para identificar el tipo de licenciaturas que pueden ser afínes a ti.
Si prefieres actuar con base en la información que tienes y datos duros, reflexionas de forma crítica sobre lo que lees o escuchas, te consideras pragmático y te comprometes a alcanzar tus objetivos sin importar su dificultad, es posible que empates con la personalidad “logista”.
Aunque hay muchos ejemplos de títulos universitarios que pueden coincidir con estos rasgos, nos enfocaremos en 2 de las carreras que son más afínes a estos: Mercadotecnia y Contaduría.
Ten presente que desde la llegada de las nuevas tecnologías y el Internet, los profesionales de la Mercadotecnia tienen cada vez más herramientas para analizar el comportamiento de los consumidores y los mercados, predecir tendencias en las industrias y encontrar patrones en los usuarios.
Todo esto, en combinación con tu habilidad para analizar y tomar decisiones, te puede llevar a proponer estrategias de comercialización y promoción que lleven al éxito a grandes empresas.
Por otro lado, quienes se dedican a la Contaduría, tienen en sus manos el manejo de los números de una empresa y, por ende, la forma en la que comprendan los indicadores y cifras de estas, las determinaciones que hacen y las estrategias financieras que ponen en práctica, pueden dar como resultado el fracaso o el éxito de una organización.
Así que, sin duda, si cuentas con algunos de los rasgos que mencionamos en este punto, tendrás mucho éxito en esta opción académica y podrás impactar positivamente el entorno empresarial.
¡Dedica tiempo a conocerte!
Si llegaste hasta este punto del artículo, seguramente ya sabes cómo algunos de los rasgo de tu personalidad, pueden ser clave en el proceso de orientación vocacional que llevarás antes de comenzar la universidad.
En resumen, la idea es que te tomes todo el tiempo que necesites para entender quién eres, cómo te ves, qué te gusta y para qué eres bueno, puesto que en las respuestas a estas preguntas está la clave para que elijas de forma certera tu camino profesional.
Ten presente que ningún rasgo de tu personalidad es bueno o malo, ya que, de hecho, la diversidad es lo que nos complementa; lo importante aquí es que aquello que tienes y que te distingue, puedas hacerlo crecer.
¿Necesitas un poco más de orientación vocacional antes de tomar una decisión? ¡Realiza esta prueba!
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