Muchos empresarios piensan que, de operar más como negocios, las universidades tendrían una mayor oportunidad de prosperar, y sostienen la idea de que el área de interés de los profesores es reducida y bien podrían esforzarse más por cultivar otros aspectos de su administración.
Consideran que, si las universidades se manejaran como empresas, las fuerzas del mercado eliminarían al personal de bajo rendimiento.
Pero, ante todo, es cierto lo contrario. El mundo empresarial tiene mucho que aprender de los investigadores académicos y, en vez de enfocarse en el crecimiento a corto plazo, tendría que concentrarse en adquirir recompensas a largo plazo. Lo que no sólo enriquecería a las empresas, sino también a la sociedad.
No obstante, a muchos investigadores sí les preocupa forjarse una reputación como innovadores y visionarios capaces de dar forma a los avances que incorporarán a sus proyectos las empresas más exitosas y demás iniciativas comerciales emergentes.
Los líderes empresariales harían bien en emular a los investigadores si desean que sus empresas moldeen el panorama tecnológico de esta década y más allá. Éstas son 5 lecciones que pueden aprender de ellos:
1. Centrarse en resultados generalizablesLa investigación académica se caracteriza por abordar problemas fundamentales cuyas soluciones pueden generalizarse a varias circunstancias individuales. Por el contrario, las soluciones puntuales se limitan a resolver problemas concretos y casi nunca pueden volver a utilizarse.
Aunque la mayoría de las empresas no recurren a investigación que pueda ser generalizada, cualquier empresa podría beneficiarse de resolver problemas en modos que trasciendan las soluciones puntuales.
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2. No dejar de preguntar "¿por qué?"La investigación antecede a la innovación. Los académicos deben hacerse la pregunta "¿por qué?" para crear hipótesis acerca de cualquier fenómeno relevante. Sería útil alentar tanto a ejecutivos como a empleados a cuestionar el status quo en aras de la innovación.
Incontables nuevas empresas buscan adoptar esta práctica, pero las grandes empresas también deberían fomentarla. Las reuniones periódicas con clientes y empleados orientadas a responder sus preguntas o inquietudes son un método inicial para llevarla a cabo.
3. Minimizar la influencia de las jerarquíasLos equipos de investigación académica suelen ser pequeños y de proyección horizontal, los profesores trabajan mano a mano con pasantes e incluso estudiantes. La jerarquía tiene una mínima importancia para la ideación de propuestas.
Cualquiera puede proponer ideas significativas. La cultura empresarial que aprovecha esta capacidad posee una gran ventaja sobre la que sólo se atiene a las propuestas de un jefe.
4. Encontrar las respuestas en la simplicidadMuchos investigadores se guían por el principio de recurrir a las soluciones más directas en términos de probabilidad y de simplicidad. Ésta última es elegancia en muchos de los esfuerzos humanos y en especial en el diseño tecnológico.
Seguramente, diversos productos serían más útiles si la simplicidad fuera un principio prioritario en su diseño o planeación.
5. Cultivar el pensamiento creativoA algunos empresarios podría parecerles lenta la vida académica, pero su aparente lentitud no carece de propósito. Los investigadores necesitan tiempo para pensar, y su reflexión y proceso de pensamiento sucumben ante la prisa, el estrés y la fatiga, ya que abruman la mente y su capacidad para establecer conexiones.
Si los ejecutivos desean que sus empleados se vuelvan más innovadores, es preciso que les den tiempo para pensar.
Estas cinco lecciones, aplicadas siempre por investigadores, han sido fruto de muchos de los grandes avances de los que hoy, como sociedad, disfrutamos.
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Aunado a que el lucro casi nunca motiva a estudiantes o profesores, dirigir las universidades como empresas corrompería los ingredientes necesarios para originar tales avances.
Es un estereotipo común el que los profesores sean vistos como personas fuera de contacto con la realidad. Pero esto es un prejuicio extendido. Más bien, la realidad con la que están en contacto es una que se proyecta para el futuro y cualquier empresa aumentaría su potencial con un tipo de visión semejante.
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