El análisis estratégico es un proceso que implica investigar el entorno empresarial en el que opera una organización.
El análisis estratégico es una herramienta esencial para formular la planificación estratégica en torno a su toma de decisiones y buen funcionamiento. Con ayuda de la misma, los objetivos o metas establecidas pueden alcanzarse con mayor claridad.
En el esfuerzo constante por crecer, las organizaciones deben realizar periódicamente análisis estratégicos, los que, a su vez, contribuyen a determinar qué áreas necesitan mejoras. Para un funcionamiento eficiente, se vuelve fundamental la consideración acerca de cómo deben implementarse los cambios.
El análisis estratégico es crucial para las empresas que han desarrollado objetivos y una misión para sí mismas. Todas las organizaciones líderes reconocidas por sus logros llevan años de planificación estratégica que han implementado en varias etapas.
La planificación estratégica es una tarea a largo plazo que conlleva planificación continua y sistemática e inversión en recursos. La pregunta primordial que deben plantearse las empresas al realizar análisis estratégicos es: ¿Cómo está constituido el mercado? ¿Cómo son los clientes activos en este sector?
Al llevar a cabo análisis estratégicos, las organizaciones deben conocer a sus competidores y así poder definir una estrategia que optimice su posicionamiento en el mercado.
Una de las funciones más importantes de la planificación estratégica es predecir eventos futuros y deducir estrategias alternativas en caso de que cierto plan no funcione como se esperaba.
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Tipos de análisis estratégico
Análisis estratégico interno: Como su nombre indica, por medio de este análisis las organizaciones evalúan sus procesos internos e identifican los puntos positivos y negativos. Establecen entonces el conjunto de recursos que pueden utilizarse para mejorar la imagen de la empresa en el mercado.
El análisis interno parte de la evaluación del desempeño de la organización, lo cual contempla su potencial y su capacidad para crecer.
El análisis de las fortalezas de una empresa debe estar orientado al mercado y enfocarse en el cliente. Las fortalezas sólo cobran un sentido pleno cuando le facilitan a la empresa satisfacer las necesidades del cliente. Asimismo, deben conocerse las debilidades y limitaciones, aunque puedan presentarse en el futuro.
El análisis FODA es una de las técnicas de análisis estratégico interno más usadas. No existe mejor manera de beneficiarse de un análisis estratégico que al utilizarlo para detectar las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas involucradas en un proyecto.
Del análisis FODA puede surgir una visión sólida y de largo plazo a través de la planificación estratégica para una organización.
Lo más relevante es evaluar de forma constante el entorno en el que opera la empresa y actuar en consecuencia. Así, es esencial que una organización tenga en cuenta el principio FODA para poder planificar de manera eficiente.
Mediante un análisis FODA exhaustivo, cualquier empresa puede prevenir una serie de problemas capaz de sobrevenir de no realizarse un análisis sistemático.
Describamos con más detalle estos atributos y entendamos cómo una organización puede realizar un análisis estratégico completo para poder planificar y desempeñarse mejor con cada año que pasa:
1. Fortalezas: Existen varios atributos positivos dentro de una empresa que pueden controlarse para obtener mejores resultados, son las fortalezas, lo que la diferencian de las demás.
Existen ciertos recursos o estrategias que año tras año optimizan los procesos de tu organización. Conocerlos también se considera una fortaleza. Conocer este tipo de información es muy importante porque éstos son los elementos que conceden ventajas sobre la competencia.
2. Debilidades: Es prácticamente imposible que una organización o una empresa sólo tenga fortalezas y carezca de debilidades. Por lo tanto, habrá ciertas cualidades que necesitarán ser mejoradas para dar lugar a un mejor desempeño y competencia en el mercado: son debilidades empresariales.
La mayoría de los factores son previsibles y una organización necesita identificarlos con mucha anticipación y abordar los problemas con medidas correctivas.
3. Amenazas: Existen factores negativos que afectan el crecimiento de una organización y estos factores también pueden analizarse.
Tales factores deben detectarse con el fin de que pueda implementarse una estrategia de gestión de riesgos para que ciertas amenazas -un mayor valor de marca en la competencia, una mejor relación de ésta con los minoristas, etc.- no tengan un efecto adverso en el crecimiento de la empresa.
Además, amenazas como múltiples jugadores en el mercado con los mismos productos, una caída de la economía, publicidad más efectiva de un producto por parte de los competidores, son algunas amenazas que deben manejarse con cautela para que la competencia no pueda aprovecharse de la situación.
4. Oportunidades: Es preciso detectar las oportunidades que una organización tiene para crecer. Conocer el camino que debe seguir es un paso indispensable hacia el éxito. Aprovechar aquellos factores externos positivos para la misma.
Análisis estratégico externo: Una vez que una organización ha completado con éxito su análisis interno, necesita conocer los factores externos que podrían obstaculizar su crecimiento.
Para ello, es necesario que identifiquen cómo funciona el mercado y cómo reaccionan o se comportan los consumidores ante determinados productos o servicios. La medición de la satisfacción del cliente es un método común de análisis externo.
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El análisis PESTAL es una de las técnicas más utilizadas de análisis externo. El proceso que suele adoptarse cuando se emplea la técnica PESTAL es relativamente sencillo.
El análisis PESTAL (factores políticos, económicos, sociales, legales y ambientales) describe el marco de factores macroambientales incluidos en el componente de escaneo ambiental del análisis estratégico externo.
Este modelo se ha ampliado añadiendo factores éticos y demográficos. Forma parte del análisis externo al realizarse un análisis estratégico o una investigación de mercado y comporta una visión general de los distintos factores macroambientales que la organización debe tener en cuenta.
Al utilizar el análisis PESTAL, uno puede:
- Descubrir problemas clave más allá del control de la organización, como los cambios en el escenario político que modifican las reglas capaces de ser implementadas en cualquier momento.
- Identificar el impacto de cada problema.
- Conocer lo importantes que son estos temas para la organización.
- Calificar la probabilidad de que ocurran.
- Considerar de manera práctica las implicaciones si el problema ocurriera.
Además de que el análisis estratégico puede llevar más tiempo de lo esperado y presentar muchas opciones a elegir, son considerablemente más las ventajas que les ofrece a los empresarios, si se toman en cuenta la claridad y las mejoras competitivas a que se tienen acceso.
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