Una adolescente puede sentir frustración al no alcanzar sus objetivos académicos o personales; por ello, es importante que le ayudes a tu hija a ver sus fracasos con objetividad para que los convierta en una oportunidad de aprendizaje y crecimiento. Descubre algunos consejos a continuación.
Mentalidad positiva
Durante la adolescencia es muy sencillo que las jóvenes se agobien y vean sus problemas como algo imposible de resolver, sobre todo ante un fracaso. Por lo que, desde esta etapa, debes fomentar en tu hija una mentalidad positiva. Enséñale a que, en vez de fracasos nombre a éstos como experiencias, la cuales le servirán para su desarrollo y aprendizaje.
Analizar en qué falló
Si, por ejemplo, tu hija salió mal en un examen, es importante que identifique qué es lo que hizo mal, puede ser que no estudió lo suficiente o no tomó los apuntes correctamente, de esta forma evitará repetir los mismos errores la próxima vez.
Hazle saber que no está sola
Aunque hay ocasiones en las que debes llamarle la atención para que sea constante, no debes olvidar que un fracaso –tanto en la adolescencia como en la vida adulta– puede llegar a ser un golpe muy duro. Por esta razón es primordial que apoyes a tu hija, que hables con ella y la aconsejes.
Que no se sienta avergonzada
Aunque cada fracaso es distinto, es recomendable que le hagas saber a tu hija que fue lo suficientemente valiente para asumir un riesgo. Aceptar sus errores le ayudará a aprender de ellos, además de estar abierta a tus recomendaciones y las de sus maestros que le permitan encontrar una solución.
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