No es sorpresa que las adolescentes pasen cada vez más tiempo usando dispositivos tecnológicos, ya sea para comunicarse, hacer tarea, divertirse o encontrar información relevante. Lo mismo ocurre tanto con niños como con adultos, la tecnología es ya un aspecto imprescindible en nuestras vidas.
Sin embargo, demasiado tiempo frente a la pantalla puede ser causa de diversos problemas. El uso excesivo de estos dispositivos aumenta el riesgo de obesidad, interfiere con las actividades sociales y la convivencia familiar, y afecta la salud mental.
Cabe también decir que un uso más moderado de los mismos puede conllevar beneficios a nivel académico, social y físico. Así que vale la pena dar la debida importancia a establecer límites al respecto.
Entonces, ¿qué puedes hacer? ¿Qué estrategias les han ayudado a otras adolescentes? Cada persona es diferente y una estrategia puede ser más efectiva para una que para otra.
Esperamos que alguno de estos 7 tips te sirvan para que limites tu tiempo de pantalla.
1. Convierte el tiempo de pantalla en privilegio
El tiempo de pantalla hoy en día suele considerarse más un derecho que un privilegio. Al tener acceso casi inmediato a varios dispositivos se ha vuelto mucho más fácil que podamos usarlos siempre que queramos.
Pero si te mentalizas a convertir el tiempo de pantalla en un privilegio que debes ganarte, lograrás limitarlo mejor. Por otro lado, al postergar tu gratificación y controlar tus tendencias aprenderás una valiosa lección que te acompañará de por vida.
Antes de que comiences a entretenerte en tu celular o la televisión, prioriza la tarea y los quehaceres domésticos.
2. Sustitúyelo por hábitos más saludables
Sustituir el tiempo de pantalla por hábitos distintos no significa que lo abandones por completo. Solamente ten en cuenta cuántas horas al día le dedicas y si te conviene habituarte a realizar actividades más productivas durante parte de ese tiempo.
Si crees que es algo que necesitas hacer, al final los cambios se traducirán en un mayor bienestar que eventualmente se hará notar en tu vida.
3. Evita la multitarea
Al contrario de lo que se cree, la multitarea interfiere con nuestra productividad. Muchas adolescentes están acostumbradas a enviar mensajes de texto mientras hacen su tarea o a usar las redes sociales mientras hablan por teléfono.
Por más que creas que te destacas en realizar más de una cosa a la vez, la harás con mucho mayor eficacia si te concentras sólo en ella. No sólo esto, sino que a largo plazo apreciarás cómo mejora tu concentración y tu capacidad para prestar atención.
4. Respeta tu horario
Procura incluir dentro de tu horario una hora específica en la que te vayas a dormir y no permitas que tu uso de tecnología interfiera con tu horario.
5. Deja espacio para la actividad física
Recuerda dejar espacio en tu rutina para el ejercicio, de preferencia haz actividad física a diario. Sal a caminar, practica un deporte o incluso trabaja en el patio o en el jardín; también contempla actividades que puedas disfrutar en familia como senderismo o tenis.
6. Planea días sin tiempo de pantalla
De vez en cuando, puede serte útil no usar dispositivos algunos días. También puedes considerar una desintoxicación digital más prolongada, como “vacaciones de tecnología” de una semana dos veces al año.
7. Participa en actividades familiares
La convivencia familiar es de inmensa importancia para cada uno de los miembros de la familia. Siempre que puedas, participa en actividades con ella, lo cual por supuesto implicaría no usar dispositivo alguno. Juega juegos de mesa o anima a tus padres a salir de paseo.
Como lo hemos señalado, la tecnología se ha vuelto un recurso indispensable en nuestro entorno actual, pero el tiempo excesivo de pantalla puede perjudicarnos tanto a nivel académico como físico y psicológico. Asimismo, puede hacernos dejar de lado actividades para cultivar nuestra familia y nuestras amistades.
Intenta seguir algunas de las estrategias que te hemos compartido para que reduzcas tu tiempo de pantalla. Puedes llevar un registro de tus actividades si eso te motiva. Quizás te sorprendas gratamente por los cambios.
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