El pensamiento creativo es una habilidad crucial que nos permite imaginar, innovar y responder a situaciones cambiantes o inesperadas. Desde hace varios meses ya, todos hemos tenido que volvernos creativos en el modo en que estudiamos, aprendemos y nos comunicamos, a la luz de la pandemia mundial.
Ahora más que nunca, es importante que, como estudiantes de preparatoria, cultivemos nuestro pensamiento creativo.
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Por lo tanto, necesitamos encontrar un punto de partida para realizar actividades creativas. Podemos utilizar casi cualquier elemento como un estímulo para hacerlo; desde imágenes y videos hasta historias, diagramas u objetos.
Lee acerca de los siguientes ejercicios para que puedas desarrollar tu pensamiento creativo:
1. Crear una historia a partir de una imagen
Usa una imagen como punto de partida para imaginar y crear una historia. Puedes usar cualquier imagen o fotografía, pero te convendrá que muestre al menos a una persona, que será el personaje principal.
Primero responde a preguntas como: "¿Quién aparece ahí?", “¿Dónde se encuentran?", “¿Qué hacen?”, entre otras parecidas. Luego, elige a una persona en la imagen y escribe una historia sobre ella (o sobre las demás personas también).
Piensa asimismo en preguntas como éstas: "¿Cómo se llaman?", "¿Por qué están allí?" y “¿Qué harán a continuación?”. Será mucho mejor si puedes hacer esto con más amigas o familiares, para comparar tu historia. Esto les ayudará a apreciar las diferencias entre sus historias y cómo han usado su imaginación para crearlas.
2. Crear una historia a partir de otra historia
Puedes valerte de una pauta narrativa para contar una historia: otra historia corta (o un cuento). Elige una historia corta para leer. Adáptala eliminando breves secciones de la misma -pueden ser el inicio o el final, por ejemplo- y llena los huecos redactando tus propias ideas creativas.
Si quieres empezar con un reto más fácil, puedes eliminar sólo nombres, lugares y actividades. También puedes eliminar descripciones y diálogos.
Esto puede convertirse en un juego si buscas adivinar lo que el autor pudo haber escrito de manera alternativa. Al hacerlo, te verás imaginando diferentes formas en que podría desarrollarse la narración.
3. Intenta resolver dilemas éticos
Los dilemas éticos son muy interesantes, puesto que presentan situaciones hipotéticas, personales o sociales, en las que uno debe elegir entre dos o más alternativas que, en muchos casos, parecen viables o todo lo contrario, es decir, insostenibles. Pero nada más puede elegirse una opción, como en la vida.
Aunque muchas veces enfrentamos dilemas éticos en la vida misma, aquí nos referimos a circunstancias sugeridas. Lo problemático de los dilemas es que nunca es tan fácil decidirse por una de las opciones, además de que muchas veces no existe sólo una respuesta adecuada.
Así que un buen ejercicio filosófico y de pensamiento creativo consiste en intentar resolverlos. Te dejamos el enlace de una página con 5 dilemas éticos, pero tu puedes buscar más en internet. Ve si puedes encontrar unos que se apliquen a situaciones reales y piensa en posibles soluciones.
Todas estas actividades no solo te servirán para desarrollar tu pensamiento creativo, sino que también te aportarán una sensación de control dentro del entorno incierto en el que vivimos.
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